Un proyecto no son sólo líneas dibujadas sobre un papel o en una herramienta informática, hay que plasmarlo en la realidad.
Nuestro método de trabajo parte del análisis del lugar, el entorno, la orientación, los materiales...además del estudio detallado del programa de necesidades de nuestros clientes. Se plantean así las necesidades de cada proyecto en toda su extensión y se estudian las posibles soluciones incluyendo la posibilidad material de construir dicha solución.
Además en este proceso existen dos elementos naturales para ayudarnos a completar cada proyecto, que son la luz y el espacio. Así la arquitectura fluye con naturalidad, con el único planteamiento de mantener la idea desde su origen hasta su realización formal.
Se trata de un compromiso de la arquitectura consigo misma, con la naturaleza, el lugar, las personas...
Las claves son la dedicación y el compromiso de todo el equipo humano del estudio con nuestro trabajo, que acaba transmitiéndose a nuestros clientes, de manera que se convierten en compañeros de cada aventura, de cada proyecto.